Los polígonos que portan el distintivo ‘Q’ son reconocidos con la certificación “Polígono Empresarial de Calidad” que otorga la Coordinadora Española de Polígonos Industriales en alianza con AENOR. La marca se ha desarrollado en exclusiva para certificar la calidad de las áreas de actividad económica como espacios de valor y de generación de riqueza. A través de este sello CEPE pretende avanzar hacia el concepto de “territorio inteligente”, entendiendo que este debe adaptarse en la medida de sus posibilidades a las necesidades que las ciudades, clientes y la población en general demandan en cada momento. Y que a su vez el proceso de transformación ha de realizarse de manera sostenible y eficiente.
Al sello puede optar cualquier polígono industrial con independencia de sus dimensiones o del número de empresas, dado que lo que se valora es, entre otras cosas, la verdadera eficiencia de cada área a la hora de atender a las demandas y necesidades reales de sus empresas y agentes involucrados. Una vez obtenido, la vigencia del mismo se mantiene durante un periodo de tres años. El proceso de certificación no atiende a un método estricto y cerrado sino que se basa en un modelo dinámico que se adapta en función de las características de cada polígono a través de un equipo auditor experto.
Actualmente son trece las áreas industriales que tienen la ‘Q’, repartidas mayormente entre el País Vasco y Cataluña pero también en otras comunidades autónomas como Baleares, Galicia, Andalucía o Castilla-La Mancha. Con la reciente incorporación del Polígono de Río Pinto (Coaña), Asturias pasa a formar parte de los territorios con áreas certificadas.