4.2 C
Oviedo
martes 23, abril 2024

La misión Artemis: el nuevo proyecto de la NASA para enviar astronautas a la Luna en 2025

Lo más leído

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 2 Promedio: 5)

Mucho se ha hablado en este último tiempo de la misión Artemis 1 que, después de algunas semanas de retraso, despegaba el pasado 16 noviembre rumbo a la Luna. Esta misión culminaba el pasado 11 de diciembre después de 26 días de viaje con el amerizaje de la nave Orión en el Pacífico. Esta es solo la primera parte de un proyecto más ambicioso de la NASA para llevar de nuevo a humanos a la Luna, el programa Artemis. Pero, ¿en qué consiste este programa? En este post vamos a dar detalles acerca del mismo.

Hace ya casi 53 años que la nave Apollo de la misión Apollo 11 se envió al espacio un 16 de julio de 1969. Cuatro días después, el 20 de julio de 1969, realizó su alunizaje y al día siguiente, el 21 de julio de 1969, el comandante de la misión Neil A. Armstrong y el piloto del módulo lunar LEM Edwin E. Aldrin pisaban la Luna convirtiéndose en los primeros humanos que caminaban en nuestro satélite. La misión la completaba el piloto del módulo de mando Michael Collins que no llegó a salir del mismo como estaba planeado. Después de esta misión, ha habido 5 misiones más que han vuelto a la Luna llevando a 10 astronautas más a la superficie lunar: Charles Conrad y Alan Bean en la misión Apollo 12 el 19 de noviembre de 1969, Alan Shepard y Edgar Mitchell en la misión Apollo 14 el 5 de febrero de 1971, David Scott y James Irwin en la misión Apollo 15 el 31 de julio de 1971, John Young y Charles Duke en la misión Apollo 16 el 21 de abril de 1972 y Gene Cernan y Harrison Schmitt en la misión Apollo 17 el 11 de diciembre de 1972. Por lo tanto, en un lapso de tiempo de poco más de tres años, un total de 12 astronautas (todos ellos estadounidenses) pisaron la Luna. Desde entonces, ningún ser humano ha vuelto allí.

Puntos de alunizaje de las distintas misiones Apollo
Puntos de alunizaje de las distintas misiones Apollo

Hasta el momento solo Estados Unidos ha enviado personas a la Luna. La misión Apollo 17 fue la última del exitoso programa Apollo de la NASA y la última misión en la que los humanos viajaron y caminaron sobre la Luna. Han pasado ya casi 50 años desde que el programa Apollo se canceló y el último hombre pisó la superficie lunar. Desde entonces, solo ha habido misiones no tripuladas. Sin embargo, esto podría cambiar en un futuro cercano ya que la NASA planea enviar de nuevo astronautas a la Luna dentro de su misión Artemis. El primer paso de la misión Artemis, la Artemis 1, ya se ha llevado a cabo, como comentábamos anteriormente, con éxito. Esta primera parte de la misión tenía como objetivo probar el cohete denominado Sistema de Lanzamiento Espacial (SLS por sus siglas en inglés). Sin tripulación, ha sido el primer vuelo de prueba del programa. Artemis debería culminar con una misión humana al inexplorado Polo Sur de la Luna (donde se sabe que existe agua congelada) en 2025. Nombrada en honor a la hermana gemela del dios griego Apollo, Artemisa tiene como objetivo responder una gran variedad de preguntas científicas a través de la exploración humana de la Luna, como la cantidad de agua congelada en los cráteres sombríos cerca de sus polos y cómo se formó el sistema Tierra-Luna en una antigua colisión cósmica. También pretende poner a la primera mujer y la primera persona de color en la superficie de la Luna.

Nombrada en honor a la hermana gemela del dios griego Apollo, Artemisa tiene como objetivo responder una gran variedad de preguntas científicas a través de la exploración humana de la Luna, como la cantidad de agua congelada cerca de sus polos y cómo se formó el sistema Tierra-Luna en una antigua colisión cósmica.

Pero enviar astronautas a mundos más allá de la Tierra no es solo una cuestión puramente de investigación, sino que tiene un significado más profundo. Cuando el programa Apollo logró poner un hombre en Luna, la humanidad se dio cuenta de que los límites que creíamos inalcanzables no lo eran tanto. Sin duda alguna, la misión del Apollo 11 es uno de los grandes logros de la humanidad, sino el más grande. Pero quizás, tras este logro tan descomunal, la ambición se había perdido: se había logrado lo casi imposible, ya no quedaba nada más. Ahora, tras 50 años, regresar se atoja crucial para volver a impulsar esa ansia de cruzar nuevos límites y desarrollar las habilidades y tecnologías necesarias para que las personas avancen hacia objetivos como Marte. Desde que terminó Apollo, la NASA ha luchado por recuperar el impulso en los vuelos espaciales tripulados. Muy dependiente de las decisiones de las distintas administraciones presidenciales y del Congreso, ha enviado a decenas de astronautas a la Estación Espacial Internacional, pero no ha logrado ir más allá de la órbita terrestre para enviar astronautas al espacio profundo.

Los astronautas del Apollo 15, Jim Iwrin y David Scott, utilizaron el primer Rover lunar
Los astronautas del Apollo 15, Jim Iwrin y David Scott, utilizaron el primer Rover lunar

Ahora la pelota está en el tejado del Congreso que debería dar a la NASA los recursos que necesita que no serán pocos. Artemis se enfrenta a obstáculos formidables, como la forma de construir trajes espaciales de nueva generación que puedan proteger a los astronautas en las gélidas temperaturas del polo sur lunar. Otra incógnita es el tipo de nave espacial que llevará a los astronautas en el tramo final de su viaje, hasta la superficie lunar, ya que el módulo de aterrizaje Apollo de la década de 1960 no funcionará con el cohete SLS de nueva generación de la NASA. La empresa privada SpaceX, con sede en Hawthorne, California (EEUU), es la encargada de diseñar y construir el módulo de aterrizaje Artemis, pero hasta el momento han trascendido pocos detalles del mismo. Resolver estos problemas requerirá grandes sumas de dinero. Se estima que cada uno de los primeros cuatro lanzamientos de Artemis, que incluyen tres vuelos tripulados, costará 4100 millones de dólares, según un informe de la oficina del inspector general de la NASA, que sitúa el costo total de Artemis hasta mediados de la década de 2020 en 93.000 millones de dólares. Como vemos, esto es una suma enorme, pero, si la comparamos con el programa Apollo, nos parece hasta una cantidad “razonable”. El programa Apollo costó 25.800 millones de dólares de la época, lo que hoy en día se traducirían en unos 257.000 millones de dólares (257.000.000.000 $). Para que nos hagamos una idea de lo que es esta cantidad, sirva como comparación el presupuesto general de España en 2022 que asciende a 458970 millones de euros (458.970.000.000 €). Es decir, el programa Apollo se gastó más o menos la mitad del presupuesto anual de España para llevar el hombre a la Luna.

Rover del Apollo 17 el 19 de diciembre de 1972
Rover del Apollo 17 el 19 de diciembre de 1972

Como no podía ser de otro modo, la NASA será el coordinador y líder de Artemis, ya que cuenta con el conocimiento, la estabilidad y la experiencia para liderar el camino hacia el espacio profundo. Pero hoy más que nunca, la exploración espacial humana es un esfuerzo global y Artemis es un ejemplo de este esfuerzo internacional. La Agencia Espacial Europea proporcionará una parte clave de la nave espacial Orión que llevará una tripulación a la Luna y China también está trabajando actualmente para llevar astronautas a la superficie lunar. También existe una variedad de naciones y compañías que planean lanzar misiones en el futuro cercano como son Japón, Corea del Sur, Rusia, India y Emiratos Árabes Unidos.

Pero pese a que el programa ya se ha puesto en marcha e incluso Artemis 1 ya ha concluido con éxito, la financiación aún está lejos de estar garantizada. La NASA ha financiado algunas partes del programa, como Artemis 1, con su presupuesto anual de 24.000 millones de dólares. Pero ahora está pidiendo al Congreso unos 7.000 millones más para realizar un segundo vuelo Artemis tripulado para el año 2024 y luego prepararse para el alunizaje. Los científicos creen que es el momento de apostar por poner de nuevo al hombre en la Luna. Al igual que otras naciones, Estados Unidos enfrenta una serie de desafíos, desde las consecuencias de la pandemia hasta la guerra en Ucrania y el cambio climático, que exigen atención y agotan el erario público. Pero el Congreso debería levantar los ojos al cielo.

¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 2 Promedio: 5)

Más del autor /a

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimos artículos