Distancia: 22,7 km
La ruta:
Dejamos Gijón por los barrios de El Natahoyo y La Calzada, tomando como referencia la carretera a Avilés. Tras pasar la azucarera de Veriña empieza la subida al Monte Areo, en el concejo de Carreño. De bajada encontramos la iglesia de Santolaya y, tras pasar un túnel, llegamos a Tamón. Tomamos dirección Tabaza y llegamos al concejo de Avilés rodeando el embalse de Trasona, hasta entrar en la ciudad por la Avenida de Gijón y en el casco histórico por la calle Rivero. Justo al lado, en la calle Magdalena, está el albergue municipal.
Además del Camino de la Costa, aquí confluye un ramal del Camino no tan conocido, que enlaza con el Camino del Salvador. Una vez visitado Oviedo, el peregrino tiene la opción de atravesar los concejos de Llanera y Corvera de Asturias para llegar a Avilés y continuar la ruta por la senda tradicional costera.
Para no perderse:
En el monte Areo (Carreño) se encuentra una de las mayores necrópolis de España, con dólmenes con una antigüedad de entre cinco y tres mil años. Hay más de treinta túmulos funerarios del Neolítico repartidos entre la ladera y la cima del monte, varios de ellos excavados a la vista. El monte cuenta también con una amplia y agradable área recreativa donde parar a descansar.
El Camino de Santiago tiene una amplísima tradición en Avilés, especialmente en el medievo, cuando se convirtió en el principal puerto marítimo para acoger a los peregrinos del norte y noroeste de Europa, que desembarcaban aquí para continuar camino a pie. Desde principios del s.XVI la ciudad disponía de Hospedería y Hospital de peregrinos. Hoy en día cuenta con un albergue, en el que recientemente se han llevado a cabo obras de mejora de las instalaciones, reformas en el patio exterior, labores de pintura y mantenimiento, además de la habilitación de una nueva sala de estancia-comedor. Este verano, además, está previsto renovar la instalación de agua caliente y los colchones de las habitaciones.
El Albergue de Peregrinos «Pedro Solís» está regentado por el Ayuntamiento de Avilés, en colaboración y convenio con la Asociación Astur-Galaica de Santiago Apóstol. El año pasado registró una cifra récord de peregrinos: 6.402 personas en total, de 58 nacionalidades diferentes. A esto se suman los que, cumplimentando los trámites de la Compostela en el albergue, escogen para descansar la oferta hotelera de la ciudad. Es un excelente ejemplo de cómo el Camino se ha convertido en un interesante estímulo para la economía de las poblaciones en ruta.
La ubicación del Albergue avilesino es además privilegiada, ya que permite recorrer cómodamente el casco antiguo de la ciudad, Conjunto Histórico Artístico Monumental desde 1955. A un paso, cruzando la ría, está el Centro Niemeyer, un complejo cultural que se ha convertido en la imagen del Avilés más vanguardista.