Que una niña de ocho años, que no ha visto un acordeón en su vida, tenga claro que eso es lo suyo, parece cosa del destino. Que una asturiana se haya hecho un nombre en el Blues americano tocando Zydeco y Blues del Delta, puede parecer hasta una broma, pero no lo es: esta gijonesa con formación clásica tiene alma de bluesera y prepara ahora un disco bajo el nombre de Maraya Zydeco Blues.
–María Alvarez es tu nombre. ¿De dónde surge Maraya Zydeco?
-Como muchas cosas en la vida, de una anécdota. Cuando trabajaba con Anabel Santiago, dentro del buen ambiente que se vivía, imitábamos el acento americano de mi compañero Michael Lee Wolfe, así que de María acabamos en Maraya, por acentuarlo un poco más. La verdad es que cuando me llaman así contesto, es mi segundo nombre más allá de lo artístico. Y en cuanto a lo del Zydeco, pues digamos que es por etiquetar, aunque es difícil poner una etiqueta a lo que estamos haciendo con esta banda.
-¿Por qué el acordeón?
-Pues es otra anécdota. Cuando yo era pequeña mi madre nos llevó a mi hermano y a mí al Ateneo de La Calzada, un centro cultural de Gijón y entre las actividades posibles estaba el solfeo. Y yo recuerdo perfectamente empezar a dar saltos diciendo “música, música”. Así que allá fuimos mi hermano y yo. En cuanto a por qué el acordeón, es bastante inexplicable porque no hay ninguna figura cercana a mí que lo tocara, ni amigos ni familiares, ni siquiera algún famoso que pudiera tener como referencia. Es curioso, porque si le preguntas a un crío de ocho años qué es un acordeón, me consta que hay muchos que no lo saben, pero yo en aquel entonces más que el instrumento en sí tenía ese sonido grabado en el cerebro.
-¿Hacia dónde evoluciona tu estilo?
-Ahora sigo teniendo dos frentes abiertos, por un lado la música tradicional o folk asturiana, como era el caso hace unos años con Anabel Santiago, y en la actualidad con la Asturiana Mining Company. Y en el terreno de la música americana con colaboraciones con las del disco Asturias Bluegrass Sessions, hace algunos años, o en el recopilatorio de Woody Guthrie, y ahora en el disco de Maraya Zydeco Blues, en el que estamos trabajando.
“Sigo teniendo dos frentes abiertos, por un lado la música tradicional o folk asturiana, y por otro el terreno de la música americana”
-De la música asturiana al blues de raíz, ¿todas las músicas tradicionales tienen algún elemento en común?
-Creo que sí. El elemento en común es la expresión del pueblo, muchas de ellas son para animar y están vinculadas al baile, pero también las hay con una letra que contiene una expresión de inquietudes, propias del pueblo que las vio nacer. Al final hay muchas críticas, que en España pueden ser a la iglesia o en América al problema de la esclavitud, y todo eso está plasmado en el Zydeco, como en las muiñeiras o en los temas tradicionales asturianos.
-¿En qué proyectos de futuro estás trabajando?
-Pues cada vez tengo más, la cuestión es que de aquí a un año pueda contar que se hicieron. Estoy muy ilusionada con este proyecto de Zydeco, en él me encuentro en mi salsa. Y también estoy trabajando muchísimo en el disco de la Asturiana Mining Company, y para eso tengo que cambiar el chip. Al final lo que intento es promocionar el acordeón como instrumento, más allá de los pasodobles o la música de baile. Y además tengo un proyecto de música clásica con José Ramón Méndez Cangas, que es mi profesor de toda la vida y me lo ha enseñado casi todo. El es compositor de música para acordeón, así que estoy preparando esa obra suya para ver si se puede grabar, y la verdad es que estoy muy orgullosa de ese trabajo.
Maraya Zydeco Blues:
Al acordeón: María Alvarez “Maraya Zydeco”
A las guitarras y voz: Michael Lee Wolfe
Al bajo: Angel Miguel
A la batería: Alejandro Blanco