Tapia. Paso a paso

Tanto para pasar unos días de vacaciones como para una pequeña escapada, el concejo de Tapia de Casariego se llena de reclamos para atraer al visitante. A su deliciosa gastronomía, se suma una agenda cultural y festiva muy intensa que convive con la belleza de este enclave esculpido por el mar que invita a ser recorrido paso a paso.

Muchas cosas son las que se pueden hacer y ver en Tapia de Casariego pero hay algunas que son imprescindibles. Estas son algunas propuestas.
Sin coches, sin contaminación, con la vista puesta en el mar, a un lado, y en la montaña al otro es posible dar un paseo por alguna de las numerosas playas de arena fina que encontramos el concejo: Represas, La Paloma, Serantes, Santa Gadea o Penarronda. También se pueden bordear los acantilados, a través de la Senda Costera, mientras las olas traen el aroma del Cantábrico. Recorrer el casco urbano de Tapia a pie, su paseo marítimo, La Cetárea, -piscina natural de agua salada-, el Mirador Os Cañois, el Faro, el Barrio de San Sebastián -típico de pescadores-, el Albergue de Peregrinos y su área recreativa -el Camino de Santiago llega al territorio tapiego- o disfrutar de una visita guiada por la historia de la Villa y sus emblemáticos lugares de la mano de la Asociación de Amigos de la Historia de Tapia.
Imprescindible adentrarse en el Puerto, donde además de pasear se pueden degustar en los distintos bares, sidrerías o restaurantes que allí se agrupan, tapas, aperitivos, raciones o menús, con lo mejor de la gastronomía de la zona.

Ruta del Maíz

Sin necesidad de coger el coche, otro recorrido para no perderse es el de la Ruta del Maíz aunque para poder disfrutarlo antes se recomienda visitar el Museo de Los Señores de las Casas Palacio situado en la planta baja de la Casa de Cultura, en el centro del pueblo. Allí podemos conocer, de la mano de las nuevas tecnologías, una completa historia del concejo, de los poderosos señores que fueron dueños de estas tierras y de las numerosas Casas Palacio que se distribuyen por esta geografía. Personajes que disfrutaron de gran poder y privilegios como el Marqués de Casariego, gran benefactor de la Villa o Gonzalo Méndez de Cancio, nacido en Casariego que participó de manera destacada en la Carrera de Indias, fue Gobernador de La Florida e impulsó decisivamente el cultivo de maíz. «En el museo se hace hincapié en la llegada del maíz a Europa a través de Tapia, indica Dulce Martínez concejala de Cultura y Turismo. Se dice que cuando Méndez de Cancio abandonó la colonia española de regreso a Asturias, trajo un arca llena de este preciado cereal americano que depositó en su Palacio de Casariego, y plantó en sus fincas.

Cuando Méndez de Cancio abandonó la colonia española de regreso a Asturias, trajo un arca llena de maíz que plantó en sus fincas de Casariego

En el museo podemos encontrar la reproducción del arca que trajo de América, ya que el original lo conserva la familia en el Palacio». Además de fomentar la plantación de maíz, Cancio mejoró el sistema de molienda: algunos elementos se pueden ver en el museo. Aquella gesta casi desconocida fue toda una auténtica revolución alimentaria, social y económica en aquellos tiempos de penuria. «Aquí se sigue plantando mucho maíz pero ahora se utiliza más como forraje», apunta la concejala tapiega.
Realizada esta pequeña visita cultural es momento de iniciar la Ruta del Maíz, un sencillo itinerario que recorre distintas plantaciones hasta llegar a la Capilla de la Virgen de la Encontrela, para desde allí y a través de un sendero llegar al Eucaliptón o Eucalipto de los Cancio plantado en 1870 por un niño de la familia que hoy se erige impresionante en mitad del bosque. El camino continúa hasta un área recreativa donde se encuentra la Fuente de la Encontrela desde la que se divisa el Palacio Cancio: una gran Casona rodeada de campos de maíz.
La época del año más bonita para disfrutar de este recorrido es durante los meses de verano cuando el maíz está en pleno desarrollo.

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