Las inversiones en el concejo de Mieres se centran en incrementar la calidad de vida de su población. Sus infraestructuras a nivel educacional, sanitario y deportivo están en primera línea gracias al Campus Universitario, el Hospital y el proyecto de la Ciudad del Tenis. El éxodo poblacional comienza a remitir. Al frente del Ayuntamiento, Luis María García dedica su trabajo a convertir Mieres en una referencia dentro del Area Central asturiana.
-¿Qué balance hace de las inversiones realizadas este año?
-Los ayuntamientos nos estamos beneficiando de medidas que se ponen en marcha para hacer frente a la actual situación de crisis económica, lo que supone un apoyo muy importante. Hablamos del Plan E, el llamado Plan Zapatero, que trajo a Mieres una inversión de unos ocho millones de euros. A su vez supuso la consecución del Plan Asturias que se va a poner en marcha a lo largo de 2010 y también una segunda fase del Plan Zapatero -también a lo largo de 2010- por importe de otros cinco millones de euros.
Para nosotros esto es un alivio en el aspecto inversor, independientemente de que la situación económica influya en actividades tan importantes como la construcción, que sigue generando problemas de cuadres presupuestarios, igual que en el resto de ayuntamientos españoles. Gracias a esto se están llevando a cabo muchas obras.
“Quiero destacar que vamos a edificar un ayuntamiento nuevo. Tenemos el dinero de Fondos Mineros y nuestra intención es hacer un edificio de valor arquitectónico, que permita dar un servicio adecuado y cómodo al ciudadano”
-Dentro de poco veremos un Mieres totalmente reformado.
-Mieres lleva ya unos años poniendo en marcha una dinámica de cambio total, lo que pasa es que debido a la carretera que nos limita por un extremo, y a que precisamente esa carretera comunica con las zonas menos agraciadas de la población, Mieres da una imagen equivocada a quien no para en la localidad. Nos lo comentan quienes entran en la villa y se sorprenden al verla.
Tenemos treinta mil habitantes en el casco urbano de Mieres, lo que nos convierte en la cuarta ciudad de Asturias en lo que a población se refiere, con capacidad para desplegar una completa oferta educativa, sanitaria y deportiva. Tenemos una Escuela de cero a tres años que este año fue ampliada, Campus de la Universidad, un completo hospital, cuatro campos de fútbol de hierba sintética y ocho polideportivos a disposición de los cuarenta y seis mil habitantes del concejo.
Quienes dan una idea ajustada de lo que tenemos en Mieres son los visitantes, o los mierenses que no viven aquí y vuelven. Ellos nos hablan del cambio de imagen, de la oferta de equipamientos o del cambio empresarial para eliminar la dependencia absoluta de la minería. Personalmente, considero que la presencia de la Universidad es lo más emblemático y que representa el cambio de dirección de Mieres, aún sin estar desarrollada tal y como nosotros querríamos. Por otra parte, también estamos asistiendo a un despegue importante del sector servicios.
“Tenemos treinta mil habitantes en el casco urbano de Mieres, lo que nos convierte en la cuarta ciudad de Asturias en lo que a población se refiere, con capacidad para desplegar una completa oferta educativa, sanitaria y deportiva”
-Uno de los mayores problemas que sufren los pueblos y villas asturianas es la despoblación. ¿Qué lectura hace Mieres de esto?
-Curiosamente, este año 2009 estamos asistiendo a un punto de inflexión en el descenso poblacional. Estoy seguro de que tiene mucho que ver con la puesta en marcha de las viviendas La Mayacina, lo cual significaría que hemos dado con la medida adecuada después de haber trabajado todos estos años en la búsqueda de fórmulas que nos permitieran frenar el éxodo de población. También tengo que decir que Mieres -como tal vez el resto de cuencas mineras- está sufriendo un éxodo que no es real, un éxodo de empadronamiento relacionado con las licencias fiscales y las segundas viviendas. Tenemos más población de la que figura en el padrón.
El descenso poblacional tiene que ver con que en el concejo hay mucha gente mayor, y mueren más personas de las que nacen. Pero en cuanto a la gente que se va y la que viene a vivir, la proporción se mantiene muy estable. Esto nos da a entender que somos una población atractiva. De ahí el eslogan de “Mieres para vivir”.
-¿Qué perspectivas de inversión e infraestructuras tenéis para 2010?
-Seguiremos la misma dinámica que hasta ahora. Hablamos de mejora estética y de calidad de vida de la población a base de equipamientos, porque lo impone el Plan E y porque nuestras necesidades van en esa línea.
Quiero destacar que vamos a edificar un ayuntamiento nuevo. Tenemos el dinero de Fondos Mineros y nuestra intención es hacer un edificio de valor arquitectónico, que permita dar un servicio adecuado y cómodo al ciudadano. Tenemos ya reservado un espacio en La Mayacina, mientras que el actual lo dejaríamos para actos oficiales e institucionales.
La inversión de 2010 se dirigirá a la mejora de los espacios deportivos, educativos, y la eficiencia energética. En ese aspecto la actuación que marcará época en Mieres será el proyecto que nosotros llamamos la Ciudad del Tenis: una inversión de más de trescientos millones de euros en Turón. También está ya en marcha el proyecto para la pista de karting entre Ujo y Figaredo, lo que supone una gran apuesta para los aficionados a ambos deportes.
Por último, me gustaría señalar que queremos lograr que La Mayacina finalice. Por otra parte, el Ayuntamiento de Mieres está tramitando la adquisición de unos terrenos a través de los fondos mineros, que debería ceder al Principado para la construcción de unas cien viviendas protegidas en la zona de Bazuelo. También está previsto continuar con el proyecto urbanístico de Oñón.